Materiales y colores del Neolítico. Estética y prestigio
Adornos Neolíticos, Museo de Prehistoria, Valencia |
Durante el Neolítico el hombre descubre su capacidad para
desarrollar actividades que no se dedican solo a su alimentación y bienestar,
sino que los excedentes de la agricultura y la ganadería los aprovechará para la elaboración de herramientas,
enseres y adornos personales.
El progresivo desarrollo de la capacidad de observación
llevó al hombre primitivo al descubrimiento de elementos que le ofrecía la
naturaleza , como los metales, que recogidos inicialmente en el lecho de los
ríos, fascinaron a nuestros antepasados, primero por su valor decorativo y
después por su utilidad práctica.
Se dará pasos para la selección y extracción de materias
primas de excepcional calidad, rocas semipreciosas y metales. Después seguirá
la aplicación de técnicas artesanales para transformar esas materias en productos
elaborados y especializados. Una vez finalizado el objeto deseado se procederá
a su uso como producto de intercambio o como adorno simbólico con valor social,
estético e, incluso, mágico o protector, convirtiéndose en amuleto.
Collar de piedra, Cova del Fum, MARQ, Alicante |
En el Mesolítico los adornos eran sencillos y
representativos del mundo material y
natural cercano a sus creadores, dientes, huesos y conchas. El paso a adornos
más complejos supondrá la supremacía de lo cultural sobre lo natural. En el
Neolítico y Calcolítico los nuevos adornos van a representar un nuevo orden
social y económico que no permitirá a todos los miembros de la comunidad tener
acceso a ellos por igual.
Los elementos ornamentales más solicitados serán los que
requieran mayor inversión y cuyas materias primas sean más difíciles de
localizar, bien por no hallarse en las cercanías o por su dificultad de
extracción, como los minerales. La ostentación constituye otro significado social
más que añadir al adorno y la dificultad para obtenerlo mantiene y aumenta el
status y el prestigio social de su poseedor.
Los grupos sociales se identifican por medio de símbolos,
emblemas e insignias que ayudan a los individuos a integrarse en los mismos, convirtiéndose
los gestos, fórmulas y vestimentas en uniformes y fácilmente reconocibles.
Piezas de ámbar, Laddenhoj, Museo Nacional de Dinamarca |
El hallazgo de cuentas de collar de materiales exóticos,
como el ámbar, en lugares donde no se
localiza habitualmente explica que pudiera existir en esa época una red de
intercambio de productos entre zonas alejadas geográficamente.
Ocurre algo similar con las conchas marinas, muy apreciadas
por su brillo nacarado y por su valor simbólico, utilizadas como cuentas de
collar o talladas como brazaletes y anillos, pero que han sido encontradas en
lugares muy alejados de la costa, por lo que se supone que también entrarían en
el intercambio entre comunidades. Las conchas aparecen en ocasiones pintadas de
rojo y con pequeñas perforaciones para pasar alguna fibra y convertirlas en un
collar. Las conchas de mayor tamaño pudieron haber sido empleadas como
recipientes para pigmentos.
Brazaletes de spondylus, Cultura del Danubio, Rumania |
El color también define y revela la naturaleza, el carácter
o la personalidad de las cosas, personas y divinidades, y refleja y refuerza
las diferencias sociales en términos de status, edad y género. Los colores
principalmente usados en esta época en pintura y cerámica siguen siendo los
habituales del Paleolítico, rojo, negro y ocre, aunque el blanco empieza a
emplearse con mayor profusión. Otros colores empiezan a apreciarse en la
elaboración de objetos decorativos y personales.
Piedra Variscita |
El uso de la variscita, piedra de un llamativo color verde,
o de otras piedras similares, puede mostrar el prestigio que su posesión
confería, precisamente por la originalidad de su color y por haberse encontrado
cuentas de collar de este material en ajuares funerarios ubicados en lugares
donde no es habitual hallarla.
Siglos después, el historiador romano Plinio llamaba a este
tipo de piedra callais o calaíta y la describe así:
“El callais es de un verde pálido. Se halla en fragmentos voluminosos,
pero muchas veces perforados, con cavidades llenas de materias de color
castaño. Estas piezas se tallan, pero tienen poca duración. Las más estimadas
son de color esmeralda. Cuanto más hermosas son, más deprisa pierden el color
por la acción del aceite, ungüentos o vino. Las menos hermosas se conservan mejor. No es fácil de preparar a
causa de sus partes vítreas.”
Piedra calaíta, Museo de Vannes |
Las diversas aplicaciones de sustancias como los óxidos de
hierro o el sulfuro de mercurio – el dibujo parietal, el maquillaje corporal,
la decoración de la cerámica, la protección de cueros y el secado de pieles o
la tinción de tejidos – explican el hallazgo ocasional en contextos domésticos
de recipientes y utensilios implicados en su almacenamiento, procesado y
aplicación.
La pintura de color rojo y, esporádicamente, la de color
ocre, seguirán siendo aplicadas en los ritos funerarios, pues se han encontrado
restos humanos coloreados con estos pigmentos. El tatuaje corporal puede haber sido
todavía durante este periodo un símbolo social, religioso o incluso
terapéutico. La momia del hombre de
hielo, Ötzi, conserva unos tatuajes que por su ubicación en el cuerpo podrían
significar un remedio curativo.
Algunas figuritas humanas halladas conservan restos de
policromía o dibujos que podrían revelar restos de tatuaje.
Figurita polícroma, Cultura de Cucuteni, Neolítico final |
Las figuras femeninas representadas siguen las proporciones de las Paleolíticas,
vientres abultados, senos prominentes y anchas caderas. Se cree que durante el
Neolítico surgió un matriarcado predominante por el papel de la mujer en la
sociedad y economía doméstica. La mujer cultivaba, cuidaba del ganado, criaba
los hijos y se convirtió en sanadora que recogía hierbas curativas. Su imagen
se asimiló a la Gran Madre Tierra, proveedora de fecundidad y relacionada con
el nacimiento y la muerte, es decir, el ciclo de la vida. Este papel terminaría
con la llegada de la Edad de los Metales. Las representaciones artísticas se
realizan con mayor precisión en los rasgos y muestran restos de color.
Figuras femeninas, Cultura Hacilar, Museo Civilizaciones Anatolias, Turquía |
Gracias a los ajuares funerarios que nos proporcionan información sobre los adornos
utilizados en este periodo, como brazaletes y anillos de piedra o hueso,
collares y cuentas cosidas a vestidos de dientes de ciervos y otros animales
tenemos información sobre lo que les gustaba lucir a los habitantes de la
época. Otros materiales se emplearon en la creación de objetos personales, como
el azabache, pizarra, mármol, esquisto y
ya en el Calcolítico el cobre.
Objetos del Neolítico, Cueva de la Pastora, Alcoy, Museo Prehistoria, Valencia |
En las pinturas rupestres del Neolítico levantino las
figuras humanas son esquemáticas con rasgos diferenciados y el negro y el rojo
como colores predominantes.
Pintura rupestre, Castellón |
Comentarios
Publicar un comentario