Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2014

Ámbar, la joya de las lágrimas divinas

Imagen
Ámbar y oro, tumba 102, Braida di Serra di Vaglio, Museo Getty “El ámbar fluye de una especie de pino, como sale la resina del pino y del cerezo la goma. Se rompe por la abundancia del humor, y a continuación se espesa y endurece, por congelación o frío o calor, o por la acción del mar, cuando las grandes mareas baten estas islas, son despedidos: a la costa, las olas lo mueven ya que parece estar suspendido, sin llegar al fondo.  Nuestros ancianos, que pensaron que era el jugo de un árbol, lo llamaron succino. Se demuestra que primeramente su estado fue líquido, al ver en el interior, gracias a su transparencia, diversos objetos, como: hormigas, moscas, lagartijas. Es evidente que estos quedaron pegados en el ámbar todavía líquido, y han permanecido encerrados cuando se endureció.” Resina de conífera El ámbar es una resina fósil procedente de la solidificación de la sustancia protectora  segregada por las coníferas extintas hace millones de años que arrastraba semillas, ho